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Pagar a través de Internet se ha vuelto cada vez más común en nuestra vida diaria. Ahora podemos adquirir cualquier producto o servicio con solo un clic. Sin embargo, debemos ser conscientes de los riesgos que esto implica. Al realizar compras en línea, exponemos información personal, datos bancarios y detalles relacionados con nuestros métodos de pago. En este artículo, vamos a explorar estos peligros y nos enfocaremos en los métodos que los atacantes utilizan para acceder a nuestras cuentas bancarias. Por supuesto, también ofreceremos consejos sobre cómo protegernos.

Uno de los principales desafíos que enfrentamos como usuarios de Internet es el robo de cuentas. Esto puede suceder por diversas razones. Podemos ser víctimas de un ataque de phishing, keylogger u otro tipo de malware que nos robe nuestra contraseña. También es posible que iniciemos sesión en un dispositivo inseguro que ponga en peligro nuestra privacidad. Incluso podría ocurrir que la red social o plataforma que utilizamos haya sufrido un ataque.

Cómo los atacantes roban una cuenta bancaria

Comprender cómo actúa un hacker es crucial para prevenir estos incidentes. Existen múltiples amenazas que pueden permitir que un intruso acceda a nuestra cuenta bancaria, realice transacciones en nuestro nombre o, incluso, bloquee nuestras tarjetas. Veamos cuáles son los métodos más comunes utilizados.

Ataques de phishing a través de correo electrónico o SMS

Uno de los métodos más utilizados por los atacantes para robar cuentas bancarias es mediante ataques de phishing. Básicamente, lo que hacen es enviar un cebo, generalmente a través de un correo electrónico o mensaje de texto, que contiene un enlace a una página falsa que simula ser la del banco legítimo.

Sin embargo, esta página web es fraudulenta. Cuando el usuario inicia sesión, la contraseña se envía directamente a un servidor controlado por el hacker. Esto les permite suplantar la identidad del usuario y acceder a su cuenta bancaria, ya que tienen toda la información necesaria para hacerlo.

Normalmente, los ataques de phishing suelen advertir sobre algún supuesto problema o situación urgente que requiere nuestra atención. Esto genera en la víctima la necesidad de iniciar sesión sin dudarlo. Por ejemplo, pueden afirmar que se ha detectado un inicio de sesión sospechoso y que es necesario acceder a la cuenta para verificar cierta información.

Uso de aplicaciones falsas

Este tipo de ataque suele ocurrir principalmente en dispositivos móviles. El objetivo del atacante es lograr que la víctima descargue una aplicación que aparenta ser del banco, pero en realidad es un intento de estafa. Normalmente, estas aplicaciones no se encuentran en tiendas oficiales o sitios confiables. Por ejemplo, se pueden descargar a través de enlaces de terceros o mediante archivos adjuntos en correos electrónicos.

Al igual que en el caso de los ataques de Phishing clásicos, en esta situación la contraseña también puede terminar en un servidor controlado por cibercriminales. Esto ocurre cuando se intenta iniciar sesión en un programa que aparenta ser legítimo, pero en realidad se utiliza para robar la clave.

Es importante tener en cuenta que en muchos casos, estos programas son muy similares a los oficiales y legítimos, por lo que la víctima no sospecha nada al intentar iniciar sesión y termina exponiendo sus datos personales.

Troyanos en los dispositivos

Los hackers también utilizan los troyanos como otro método para infiltrarse. Los troyanos son una variedad de malware que puede infectar tanto ordenadores como dispositivos móviles. Este software malicioso se instala en el sistema y comienza a recopilar información de todo tipo, incluso puede dar acceso remoto a un atacante.

Nuevamente, los dispositivos móviles suelen ser los más afectados. Puede tratarse de archivos descargados de sitios maliciosos, aplicaciones falsas que contienen malware o incluso complementos para el navegador u otras aplicaciones. En todos estos casos, los troyanos pueden adjuntarse y encargarse de interceptar los datos que enviamos, como las contraseñas.

Keyloggers

Los keyloggers son otra forma de malware especialmente diseñada para robar contraseñas. Su función principal es registrar las pulsaciones de teclas que realiza la víctima, lo que incluye cualquier contraseña ingresada ya sea en el ordenador o en el móvil. Estos pueden estar presentes al momento de instalar programas que contienen malware, al descargar archivos engañosos de Internet, entre otros. Los ciberdelincuentes pueden encontrar diferentes métodos para introducir un keylogger en Windows, Android u cualquier otro sistema operativo.

De esta manera, los hackers pueden averiguar el nombre de usuario y contraseña de una cuenta bancaria, lo que les brinda acceso total a la cuenta para robar dinero, realizar pagos en nombre del usuario legítimo y llevar a cabo cualquier actividad. Este es uno de los métodos más clásicos utilizados para robar cuentas bancarias.

En este tipo de sistema, podemos diferenciar dos tipos de keyloggers en función de su integración:

  • Basados en Hardware: se trata de un dispositivo similar a un pendrive que se conecta entre el teclado y el equipo, almacenando todo lo que se escribe en un archivo de texto. Dentro de esta categoría, existen dos subtipos: los adaptadores, que se conectan al teclado y se instalan rápidamente pero son fáciles de detectar; y los dispositivos, que se instalan internamente en el equipo y son más difíciles de detectar a menos que se abra el teclado o el equipo.
  • Basados en Software: se trata de un programa que se instala en el ordenador como un virus y tiene la capacidad de rastrear y almacenar las actividades realizadas en el mismo. Suelen instalarse sin que el usuario tenga conocimiento de su existencia y pueden capturar pantallas mientras registran las pulsaciones del teclado. Estos keyloggers suelen distribuirse a través de correos electrónicos de phishing que incluyen el software como un archivo adjunto.

En cuanto a los Keyloggers basados en Software, existen varios tipos disponibles:

  • Basados en núcleo: Tienen la capacidad de acceder al núcleo del equipo e instalarse en el hardware.
  • Enganchados: Se activan únicamente cuando se realiza una pulsación en alguna tecla.
  • Hipervisor: Se anidan detrás del sistema operativo sin realizar modificaciones.
  • Basados en Kernel: Un programa malicioso que se incrusta directamente en el sistema operativo.
  • Basado en «Form grabbing»: Registra los formularios en línea y copia los datos de inicio de sesión. También puede acceder al historial del navegador.
  • De man-in-the-browser: Se instala en el navegador.
  • Basado en acceso remoto: Se utilizan de forma remota y permiten el acceso a software malicioso.

Ataques de Man in the Middle

Cuando se trata de ataques Man in the Middle, se puede decir que son altamente sofisticados, ya que el ciberdelincuente se sitúa en medio de la comunicación para interceptar datos. Aunque este modo puede parecer similar al phishing, no lo es. En un ataque Man in the Middle, el destino de la comunicación puede ser legítimo, como una entidad financiera, pero toda la información pasa por un punto intermedio sin cifrar, donde se captura dicha información. Este tipo de ataque conlleva algunas dificultades, ya que el hacker debe ser el único punto de comunicación entre los dispositivos, estando presente en las mismas redes que los hosts que son apuntados en el ataque para cambiar el enrutamiento para cada uno.

Una vez establecido el ataque, alterar esta tabla es bastante sencillo y aún más si se trata de la misma red, incluso secuestrando routers. Para ello, se utilizan diversas técnicas que modifican la caché del servidor DNS que proporciona la información del banco y la redirigen a un servidor no relacionado. Esto implica que, incluso si se accede a la página del banco a través de un motor de búsqueda, todo el tráfico pasará por un servidor intermedio.

Para defenderse de este tipo de ataques, se deben utilizar redes seguras y cifradas. No se recomienda utilizar redes Wi-Fi públicas o abiertas. En caso de que no haya otra opción, siempre se puede hacer uso de una VPN que cifre el contenido de la comunicación. Además, es una buena práctica asegurarse de que el navegador muestre «https» al inicio de las URL de los bancos.

Adivinación simple de credenciales

Otra opción es simplemente adivinar la contraseña de la cuenta bancaria. Esto ocurre cuando un usuario elige una contraseña débil y predecible, como su nombre o número de teléfono. Este es un error que puede dejar expuestas las cuentas, ya que la protección sería muy básica.

Incluso muchos usuarios utilizan contraseñas simples y muy comunes, como «1234» o «123456». Aunque cada vez más servicios exigen contraseñas más complejas, no siempre ocurre así y esto representa un problema importante. Los piratas informáticos constantemente prueban las combinaciones de contraseñas más habituales para ver si tienen suerte y pueden acceder a alguna cuenta.

Fallos de seguridad

Por supuesto, podrían aprovecharse de vulnerabilidades que existan tanto en la plataforma del banco como en nuestro equipo informático. Podrían encontrar la forma de acceder a ese sistema, robar la cuenta o insertar diferentes tipos de software malicioso mencionados anteriormente. Las vulnerabilidades de seguridad son frecuentes y siempre es recomendable corregirlas.

Nuevamente, esto puede ocurrir sin importar qué sistema operativo o tipo de dispositivo estemos utilizando. Son fallos que surgen en determinado momento y que debemos solucionar lo antes posible.

Ataques en los cajeros automáticos

Los ataques informáticos pueden afectar a todo lo relacionado con una computadora, por lo tanto, los cajeros automáticos no están exentos de estos problemas. Además de los problemas físicos como el robo de tarjetas o el acceso directo a nuestros datos, los cajeros pueden ser atacados de diversas formas a nivel informático. Por ejemplo, mediante la instalación de un teclado falso que registre nuestros datos a medida que los ingresamos.

Otro método conocido es a través de la cámara incorporada en el cajero. Los delincuentes o atacantes pueden intentar colocar sistemas similares a cámaras estenopeicas para grabar nuestro PIN a medida que lo ingresamos. Esta información suele enviarse a un receptor que por lo general se encuentra cercano, proporcionando toda la información necesaria a los atacantes, quienes en un momento posterior podrían intentar robar la tarjeta a la víctima.

Las trampas de tarjetas también pueden ser utilizadas, aunque es más un ataque físico que informático. El atacante inserta un dispositivo llamado «bucle libanés» en la ranura de las tarjetas, lo que provoca que la tarjeta quede atascada en el cajero. Mientras el usuario se dirige a la oficina para informar del problema, el atacante se acerca al cajero y tira del dispositivo para sacar la tarjeta y quedársela. Esto puede combinarse con el robo del PIN, como se mencionó anteriormente.

Los dispositivos de clonado de tarjetas se han vuelto muy populares gracias al cine, pero también existen en el mundo real. Estos dispositivos se colocan en las ranuras de los cajeros automáticos y leen los detalles de las bandas magnéticas de las tarjetas, trasmitiendo la información a receptores que también suelen estar cerca. Esto permite al atacante crear una clon de la tarjeta sin necesidad de realizar un robo.

Uso de aplicaciones alteradas

No todos los programas que se encuentran en Internet son legítimos, ni mucho menos. Esta es otra técnica que pueden utilizar para robar cuentas bancarias y acceder ilegalmente. Podrían hacer uso de aplicaciones alteradas que simulan ser legítimas, pero en realidad están diseñadas para atacarnos.

Esto puede suceder tanto con programas que se pueden instalar en dispositivos móviles o computadoras, como con sitios web. Sería similar al phishing, ya que el objetivo es hacer que la víctima crea que está frente a algo oficial, legítimo y seguro, cuando en realidad está siendo controlado por el atacante para lograr su objetivo.

Cómo determinar si mi cuenta bancaria ha sido comprometida

Los bancos son frecuentemente el objetivo de los ciberdelincuentes, ya que un ataque exitoso les puede proporcionar grandes ganancias económicas. Por otro lado, están los titulares de las cuentas bancarias, quienes pueden sufrir un daño económico significativo y tener que presentar denuncias al respecto. A continuación, vamos a enumerar las señales que podrían indicar que una cuenta bancaria ha sido hackeada, así como consejos para prevenirlo.

Si una cuenta bancaria ha sido pirateada, eso deja al cliente del banco en una posición vulnerable. Es importante tener en cuenta que no todos disponen de varias cuentas para hacer frente a una situación así. Ahora, veamos qué indicios pueden alertarnos de posibles problemas.

Transacciones pequeñas sin explicación

Los bancos de todo el mundo son objeto de ataques cibernéticos prácticamente a diario, y nuestras cuentas bancarias siempre han sido un objetivo codiciado por los delincuentes digitales. Estos ladrones no quieren llamar la atención realizando actividades sospechosas que alerten al banco o al titular de la cuenta. Por lo tanto, si hay algún movimiento extraño, se detecta rápidamente y ellos pierden tiempo.

Un signo de que nuestra cuenta bancaria puede haber sido hackeada es cuando notamos pequeñas compras en línea, generalmente de pocos euros. De esta manera, el atacante verifica que la cuenta:

  1. Está activa.
  2. Tiene fondos o crédito disponibles.

Si detectamos pagos pequeños e inusuales en nuestra cuenta corriente, debemos reportarlo de inmediato a nuestro banco para que nos informen sobre lo que está sucediendo. Además, es muy importante que nuestro banco nos permita configurar alertas por SMS, recibir estados de cuenta y recibir notificaciones de nuestras transacciones a través de la aplicación de banca móvil con notificaciones push. Por lo tanto, es fundamental instalar la aplicación de nuestro banco para tener un control total.

Notificaciones inesperadas

Si recibimos una alerta por SMS o a través de la aplicación de nuestro teléfono móvil de que se ha realizado un pago inesperado, podría ser un indicio de que algo no está bien. Es una buena práctica verificar estas notificaciones para conocer los pagos que estamos realizando. Si observamos un pago sospechoso, es esencial hacer un seguimiento y, si no es nuestro, informar inmediatamente al banco.

En caso de que nuestro banco se comunique con nosotros para informarnos sobre cambios en nuestros datos personales, nombre de usuario o contraseña, es crucial que tomemos medidas rápidamente. Esto podría ser una señal de que un ciberdelincuente está intentando acceder a nuestra cuenta bancaria.

Llamadas telefónicas para solicitar información bancaria

En ocasiones, los delincuentes pueden llamar por teléfono haciéndose pasar por empleados del banco. Su objetivo es obtener nuestro número de cuenta, nombre de usuario, contraseña u otras credenciales necesarias para acceder a nuestras cuentas bancarias.

Es importante tener en cuenta que nuestro banco nunca nos llamará solicitando datos personales, ya que ellos ya disponen de la mayoría de esa información. Si recibimos una llamada de este tipo, no debemos proporcionar información relevante. En cambio, debemos anotar el nombre y número de teléfono del cual nos llaman y luego colgar. A continuación, verificamos el número de teléfono y, si estamos seguros, podemos llamar de regreso. Si no estamos seguros del número, debemos comunicarnos con el número de teléfono público principal del banco para informar sobre el incidente al departamento correspondiente y tomar las medidas adecuadas.

Cuentas vacías, cerradas y la protección del banco

Los ciberdelincuentes suelen comenzar con pequeñas compras, pero si no detectamos los problemas a tiempo, pueden realizar transacciones más grandes y vaciar nuestra cuenta. A veces, poseemos cuentas de ahorro que utilizamos muy poco. En ocasiones, el banco nos puede informar que cerrará estas cuentas si se quedan vacías.

Por lo tanto, es importante revisar periódicamente todas nuestras cuentas en línea. Una buena práctica es revisar los estados de cuenta de todas las cuentas al menos una vez al mes. En caso de que nuestra cuenta bancaria haya sido hackeada, el banco tiene un seguro. Sin embargo, debemos tener en cuenta que la cobertura depende de la cantidad de dinero y es posible que no cubra la totalidad del saldo de la cuenta.

¿Cómo actuar en caso de hackeo de cuenta bancaria?

Este tipo de incidentes de hackeo son más comunes de lo que se piensa, y muchos usuarios no saben cómo reaccionar de manera adecuada. Es extremadamente importante no solo actuar rápidamente, sino también hacerlo de la manera correcta para evitar mayores problemas. Esto nos ayudará a evitar muchas complicaciones, aunque no podremos evitar todas ellas. Por lo general, estos casos se detectan cuando notamos cambios drásticos en nuestros saldos o comenzamos a recibir avisos de transacciones sospechosas. En la primera mitad del año 2022, se registraron más de 200,000 estafas de este tipo en España.

Procedimiento a seguir

Lo primero que debemos hacer es informar a nuestro banco. Es importante hacerlo tanto por nuestra seguridad como para alertar sobre el problema y evitar que afecte a más personas. Al alertar, estamos dando la oportunidad a la entidad de revisar si hay alguna vulnerabilidad en su sistema. Además, debemos cambiar todas nuestras claves bancarias y bloquear nuestras tarjetas de inmediato.

Posteriormente, es necesario presentar una denuncia correspondiente. Aunque muchos usuarios dudan de su eficacia, denunciar el problema siempre es una buena idea. Ayuda a avanzar en la investigación y puede beneficiar a otras personas. Aunque en ocasiones sea complicado identificar a los delincuentes debido a las diversas capas de ocultación que utilizan, denunciar es fundamental.

Por último, es recomendable realizar una reclamación al banco para recuperar el dinero. Según la jurisprudencia, las entidades son responsables de los delitos cibernéticos que ocurren ocasionalmente. Esto indica que no se han aplicado las suficientes medidas de seguridad. En general, los bancos cuentan con complejas y efectivas medidas de seguridad.

Seguridad de las entidades bancarias

Las entidades bancarias son conscientes de la importancia de la seguridad informática para proteger los datos confidenciales de sus clientes y garantizar transacciones seguras. Para lograrlo, implementan una serie de métodos de seguridad que abarcan diferentes aspectos de su infraestructura y operaciones.

  • Autenticación multifactor (MFA): La autenticación multifactor combina varios elementos para verificar la identidad de un usuario. Además de la contraseña, se pueden utilizar otros factores como tarjetas de seguridad, tokens físicos o verificaciones biométricas como huellas dactilares o reconocimiento facial. Esto agrega una capa adicional de seguridad al requerir múltiples elementos para acceder a una cuenta o realizar transacciones.
  • Encriptación de datos: La encriptación de datos es fundamental para proteger la información confidencial transmitida entre el cliente y el banco. Los bancos utilizan protocolos de encriptación seguros, como SSL/TLS, para garantizar que los datos transmitidos estén cifrados y protegidos contra interceptaciones o modificaciones por parte de terceros no autorizados.
  • Firewalls y sistemas de prevención de intrusiones (IPS): Los bancos utilizan firewalls y sistemas de prevención de intrusiones para proteger su red contra ataques externos. Estas medidas de seguridad monitorizan y controlan el tráfico de red, bloqueando intentos de intrusión o actividades sospechosas que pongan en peligro la seguridad de la información.
  • Detección de anomalías y sistemas de monitoreo: Los bancos implementan sistemas de monitoreo avanzados que supervisan constantemente las actividades y transacciones en busca de patrones y comportamientos anormales. Estos sistemas utilizan algoritmos y técnicas de análisis para detectar posibles amenazas o actividades fraudulentas y toman medidas inmediatas para mitigar los riesgos.
  • Actualizaciones de seguridad y parches: Los bancos realizan actualizaciones periódicas de seguridad en su infraestructura y sistemas operativos para protegerse contra las últimas vulnerabilidades y amenazas. Esto incluye la aplicación de parches de seguridad, actualización de software y la implementación de medidas de mitigación de riesgos.
  • Capacitación y concienciación de los empleados: Los bancos comprenden la importancia de los empleados en la seguridad informática. Por eso, proporcionan capacitación regular sobre prácticas de seguridad, políticas internas y procedimientos para manejar datos confidenciales. Esto ayuda a crear una cultura de seguridad en toda la organización y reduce el riesgo de incidentes causados por errores humanos.
  • Auditorías de seguridad: Los bancos realizan auditorías de seguridad periódicas para evaluar y validar la eficacia de sus controles de seguridad. Estas auditorías son llevadas a cabo por equipos de seguridad internos o externos y ayudan a identificar posibles vulnerabilidades o debilidades en la infraestructura de seguridad.

Medidas para prevenir el robo de cuentas bancarias

Entonces, ¿qué podemos hacer para evitar que roben nuestra cuenta bancaria? Afortunadamente, hay ciertos pasos y consejos que podemos seguir fácilmente para mejorar nuestra seguridad. A continuación, presentamos algunas recomendaciones que todos los usuarios deberían tener en cuenta en su vida diaria:

Utilizar contraseñas sólidas

Lo primero es crear una contraseña de acceso sólida. Una buena contraseña es la principal barrera de seguridad que impide que los intrusos accedan fácilmente a nuestras cuentas. La contraseña debe cumplir ciertos requisitos, ya que no sirve de nada utilizar combinaciones típicas como «1234» o similares. La contraseña debe ser única e incluir letras (mayúsculas y minúsculas), números y símbolos especiales. Es importante que sea completamente aleatoria y no esté relacionada con información personal fácilmente deducible, como nuestro nombre o cualquier palabra asociada con nosotros.

Por ejemplo, una buena clave podría ser 3D)H-$rl82d/j. Como se puede observar, tiene una longitud adecuada y utiliza letras, números y símbolos especiales. Esto hace que sea extremadamente difícil para un intruso descubrirla.

Activar la autenticación en dos pasos

Sin embargo, la contraseña por sí sola no es una barrera infalible. Además del riesgo de que alguien la descubra, también debemos considerar las filtraciones de datos o el uso de keyloggers para registrar todo lo que escribimos en el teclado. Por ejemplo, podría haber algún problema con los servidores del banco y nuestros datos y contraseñas podrían quedar expuestos.

Para evitar esto, no hay mejor consejo que activar la autenticación en dos pasos o 2FA. Aunque no está disponible en todos los servicios, su uso se está volviendo cada vez más común. Básicamente, se trata de una medida adicional de seguridad que requiere un segundo paso después de intentar iniciar sesión.

Este segundo paso generalmente implica el uso de un código que recibimos a través de SMS o correo electrónico. También podemos utilizar aplicaciones de 2FA para este propósito. El objetivo es evitar que cualquier persona, aunque tenga la contraseña de acceso, pueda acceder a nuestra cuenta bancaria. Siempre se requerirá ese segundo paso para poder ingresar. Podríamos decir que hoy en día es algo imprescindible para proteger nuestras cuentas bancarias.

Tener el equipo protegido con un buen antivirus

Para evitar la entrada de troyanos, keyloggers y otros tipos de malware, es crucial proteger nuestro sistema. ¿Cómo podemos lograr esto? Un antivirus es la base de todo. También podemos contar con un cortafuegos para filtrar conexiones y bloquear las peligrosas, así como complementos de seguridad para el navegador. Sin embargo, no solo debemos enfocarnos en este tipo de programas, sino que también es importante mantener nuestro equipo actualizado. Esto nos ayudará a solucionar vulnerabilidades que podrían poner en peligro nuestros sistemas. Es esencial instalar todos los parches y actualizaciones disponibles.

Un buen ejemplo es Microsoft Defender, que viene integrado en los sistemas operativos de Windows y funciona bastante bien. No obstante, existen muchas opciones disponibles, tanto gratuitas como de pago. Por ejemplo, Avast o Bitdefender son algunas alternativas recomendables. Sin embargo, siempre debemos asegurarnos de que el antivirus esté funcionando correctamente, esté actualizado y se haya descargado de una fuente confiable.

Eliminar complementos sospechosos

En muchas ocasiones, el hackeo de una cuenta se produce debido a la instalación de complementos o la concesión de permisos a aplicaciones sospechosas. Esto puede ocurrir, por ejemplo, en Facebook, donde podemos agregar diferentes aplicaciones con diversas funciones. Este problema, en ocasiones, puede dar lugar al robo de información.

Si sospechamos que nuestra cuenta ha sido hackeada o detectamos indicios de actividad sospechosa, es crucial que analicemos las aplicaciones y complementos que podrían estar involucrados, y que los eliminemos para evitar que se repita.

Utilizar exclusivamente aplicaciones oficiales

Es fundamental instalar programas solamente desde fuentes confiables y que sean oficiales. Debemos evitar descargar aplicaciones bancarias desde sitios de terceros o enlaces desconocidos en Internet. Tiendas de aplicaciones como Google Play son una opción segura y confiable.

Esto aplica no solo a aplicaciones bancarias específicas, sino también a cualquier aplicación en la que realicemos pagos. En esos casos, debemos proteger al máximo nuestros datos y garantizar que no expongamos información confidencial en la red.

De esta forma, evitaremos instalar aplicaciones falsas o que hayan sido modificadas con el propósito de robar datos y contraseñas. A menudo, encontraremos software que promete mejoras o complementos, pero es importante tener en cuenta la seguridad antes de instalarlos. Los complementos para navegadores son un claro ejemplo. Aunque existen muchos disponibles en Internet, no todos son confiables.

Configurar alertas en varios medios

Una precaución a tener siempre en cuenta es configurar alertas en varios medios, como correo electrónico o SMS, e incluso ambos si es posible, para monitorear las transacciones en nuestra cuenta bancaria. En el pasado, las personas solían enterarse de que les habían robado dinero de sus cuentas solo cuando recibían el extracto bancario a fin de mes.

Hoy en día, tenemos la capacidad de estar informados en todo momento sobre lo que sucede en nuestras cuentas y cuándo sucede. Gracias a este tipo de alertas, podemos detectar rápidamente cualquier actividad sospechosa y tomar medidas de inmediato.

Mantener las actualizaciones más recientes

También es importante mantener nuestros dispositivos actualizados correctamente. A veces, surgen vulnerabilidades que pueden comprometer el buen funcionamiento de nuestros dispositivos. Es posible que un hacker aproveche ciertas vulnerabilidades presentes en la red. Los fabricantes y desarrolladores lanzan parches y actualizaciones para corregir estos errores. Por lo tanto, es crucial mantener siempre nuestros equipos con las últimas versiones y no correr riesgos innecesarios. Este es un aspecto que se aplica a todos los dispositivos y sistemas operativos, independientemente de su tipo.

Otra alternativa en relación a las actualizaciones es utilizar un dispositivo con jailbreak. Con este método, los dispositivos pueden desactivar los protocolos de seguridad permitiendo a los usuarios descargar aplicaciones que normalmente no sería posible. Esto se hace con el propósito de otorgar a los usuarios cierta libertad en sus dispositivos, pero también puede suprimir precauciones que nos mantienen protegidos al utilizar nuestras credenciales y otros datos.

Precaución con las redes Wi-Fi públicas

Una de las ventajas de hoy en día en cuanto a las redes es que podemos estar conectados prácticamente desde cualquier lugar y en cualquier momento. Incluso cuando vamos a un restaurante o a nuestra cafetería favorita, generalmente tenemos acceso a una red Wi-Fi gratuita para los clientes, que nos permite usar Internet sin ningún costo adicional.

Aunque esto nos brinda la ventaja de mantenernos conectados, también tiene sus inconvenientes en términos de seguridad. Esto se debe a que, al igual que esta red está disponible para nuestro uso, también está disponible para el público en general, incluyendo a los hackers, quienes suelen aprovechar este tipo de redes para obtener datos de las personas, siempre y cuando se les brinde la oportunidad.

Dependiendo de las actividades que realicemos mientras estemos conectados a estas redes, lo más recomendable es no realizar operaciones bancarias ni ninguna otra actividad que comprometa la seguridad de nuestros datos. También podemos considerar el uso de software VPN para brindarnos una mayor protección contra este tipo de amenazas.

Uso de buen sentido común

Esto quizás sea lo más importante de todo. Es fundamental evitar cometer errores, ya que esto nos protegerá de ataques como el Phishing, que justamente buscan que la víctima se equivoque y que inicie sesión en un sitio web falso o haga clic en un archivo que en realidad es malware. Podríamos decir que la mayoría de los ataques requieren que nosotros cometamos algún error.

Siempre que naveguemos e iniciemos sesión, debemos hacerlo en sitios web oficiales, seguros y confiables. Debemos evitar cometer errores básicos, como hacer clic en enlaces que nos lleguen por correo electrónico de remitentes desconocidos o utilizar exclusivamente programas oficiales. Estas precauciones nos ayudarán a proteger nuestras cuentas bancarias.

En resumen, el robo de cuentas bancarias es uno de los problemas de seguridad informática a los que nos enfrentamos si cometemos errores o somos víctimas de ataques cibernéticos. En este artículo, hemos revisado cuáles son las principales vulnerabilidades y cómo podemos protegernos para evitar que esto ocurra.

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