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Después de ahorrar durante un período de tiempo y alcanzar cierto nivel de capital, la forma más adecuada de obtener beneficios es invertir nuestro dinero en un portafolio de inversión o cartera de valores. Esta estrategia nos permitirá mantener el valor de nuestras inversiones y obtener rendimientos en el futuro.

¿Qué es un portafolio de inversión?

Un portafolio de inversión es una colección de activos financieros que incluye diversos elementos. Por lo general, los inversionistas arman sus portafolios con acciones, bonos, commodities, efectivo, fondos de inversión y ETFs. Sin embargo, algunos inversionistas más arriesgados pueden agregar inversiones inmobiliarias, arte y capital privado a su portafolio.

Los inversionistas pueden gestionar ellos mismos sus portafolios si tienen el tiempo y los conocimientos necesarios, o bien pueden delegar esta tarea a gestores profesionales.

¿Por qué es importante tener un portafolio de inversión?

Imaginemos que tenemos una gran cantidad de dinero. ¿Lo depositaríamos todo en un mismo banco o en diferentes entidades para diversificar el riesgo? Sin duda, elegiríamos la segunda opción.

Aquí encontramos un concepto clave en la inversión: la diversificación del riesgo. Y precisamente, los portafolios de inversión nos ayudan a solucionar este aspecto.

La diversificación consiste en reducir el riesgo mediante la distribución de las inversiones entre diferentes instrumentos financieros. De esta manera, cuando el mercado no se comporte como esperamos, nuestro portafolio puede mantenerse de forma más estable. Esto se debe a que evitamos una correlación muy alta entre los activos, de manera que cuando el mercado caiga, no todos los activos de nuestra cartera se verán afectados de la misma manera.

Componentes de un portafolio de inversión

Los componentes de un portafolio de inversión dependen en gran medida de los objetivos personales, la personalidad y la tolerancia al riesgo del inversionista. Un buen portafolio debe buscar un retorno ajustado al riesgo.

En términos generales, es habitual encontrar los siguientes elementos en una cartera de inversiones:

  • Acciones: Suele ser el componente más frecuente.
  • Bonos: Un bono es un título de deuda que se emite comúnmente por parte de gobiernos o empresas, con el fin de obtener financiamiento.
  • Inversiones alternativas: Estas incluyen activos como el oro, bienes raíces, capital privado, infraestructuras, entre otros.
  • Fondos de inversión: Estos fondos son carteras gestionadas por expertos, pero también es posible formar parte de una cartera personal de un inversionista para complementarlo con otras estrategias de inversión.
  • ETFs: Los ETFs son productos que combinan características de fondos de inversión y acciones. Son fondos que cotizan en bolsa y se destacan por su alta liquidez y bajos costos. Los inversionistas a menudo utilizan ETFs para invertir en sectores específicos (salud, finanzas, telecomunicaciones) o en temáticas de mercado (inteligencia artificial, transición energética, envejecimiento de la población). Por ejemplo, pueden conocer los ETFs de Globa X.

Ejemplos de carteras de inversión

A continuación, presentamos ejemplos de carteras modelo creadas por reconocidos inversionistas de la industria.

Portafolio Permanente de Harry Browne

Este popular portafolio, creado por Harry Browne, se destaca por su simplicidad y facilidad de replicación. Busca estabilidad y seguridad, y puede ser fácilmente replicado a través de 4 ETFs.

  • Acciones de grandes empresas estadounidenses: 25%
  • Bonos a largo plazo del gobierno estadounidense: 25%
  • Bonos de ultra corto plazo del gobierno estadounidense: 25%
  • Oro: 25%

Si están interesados en que profundicemos en algún portafolio específico, no duden en dejarnos un comentario y elaboraremos un artículo exclusivo analizando en detalle el portafolio, estudiando su riesgo y rendimiento.

Portafolio Ivy

El portafolio Ivy de Meb Faber es una imitación de las estrategias de inversión utilizadas por las dotaciones de Harvard y Yale, diseñada para que un inversor individual pueda administrarla fácilmente.

  • Acciones de Estados Unidos: 20%
  • Acciones internacionales: 20%
  • Bonos de inversión a largo plazo: 20%
  • Commodities: 20%
  • Inversión en bienes raíces: 20%

El portafolio de Ray Dalio

Ray Dalio, reconocido como uno de los inversionistas más exitosos del mundo, es el fundador de Bridgewater Associates, el hedge fund más grande del mundo.

Desde 1991 hasta 2005, Bridgewater Associates solo tuvo pérdidas en tres años y nunca superiores al 4%. Además, durante la primera mitad de 2022, en un mercado tambaleante, Bridgewater Associates obtuvo una ganancia del 32%. Dalio desarrolló su propia versión del Portafolio Permanente, llamado «All-Weather Portfolio».

  • Bonos gubernamentales a largo plazo: 40%
  • Acciones: 30%
  • Bonos gubernamentales a mediano plazo: 15%
  • Oro: 7,5%
  • Commodities: 7,5%

Esta cartera también se puede replicar fácilmente utilizando ETFs.

Además de los tres portafolios mencionados anteriormente, es importante tener en cuenta que las administradoras de fondos nacionales e internacionales, como Vanguard, Fidelity y BlackRock, también ofrecen sus propios portafolios modelo para diferentes edades y horizontes de inversión.

Cómo construir un portafolio de inversión

Antes de explicar cómo crear una cartera de inversiones desde cero, es importante evaluar si se cuenta con el tiempo, la paciencia y los conocimientos necesarios para hacerlo. En caso de que no se cumplan con alguna de estas condiciones, los roboadvisors son una alternativa económica y eficiente a considerar, ya que ofrecen carteras modelo totalmente automatizadas, teniendo en cuenta los objetivos de inversión y la tolerancia al riesgo del inversionista.

Dicho esto, comencemos con los pasos para armar una cartera de inversión:

  1. Crear una cuenta de inversión, ya sea a través de un bróker, una casa de bolsa, una distribuidora de fondos de inversión o tu banco habitual que ofrezca servicios de inversión.
  2. Seleccionar los activos en los que deseas invertir, lo cual dependerá en gran medida de tu perfil de riesgo. Todas las instituciones supervisadas por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores requieren que los inversionistas respondan un cuestionario para determinar su perfil de inversor, el cual generalmente se clasifica en conservador, moderado o agresivo. Si no sabes qué porcentaje destinar a bonos o acciones, puedes utilizar la regla general de restar tu edad a 100 o 110 para determinar qué parte de tu cartera debe dedicarse a inversiones en acciones.
  3. Reequilibrar tu portafolio de inversión cuando sea necesario. Con el tiempo, la asignación de activos que has seleccionado puede desviarse. Si alguna de tus acciones aumenta mucho de valor, puede alterar las proporciones de tu cartera. El reequilibrio consiste en restaurar tu cartera de inversiones a su composición original, lo cual implica comprar valores infraponderados y vender valores sobreponderados. Es importante tener en cuenta el impacto fiscal de la venta de valores sobreponderados. En ocasiones, puede ser beneficioso simplemente no aportar nuevos fondos a esa clase de activos.

En resumen, crear un portafolio implica invertir en un conjunto de activos financieros que te permitirán diversificar tus ahorros y obtener buenos resultados de rendimiento en el futuro.

¿Estás listo para crear tu propio portafolio de inversión?

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