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En numerosas ocasiones, al intentar conectarnos a Internet a través de Wi-Fi, nos encontramos con diversos inconvenientes que dificultan la conexión. Estos problemas pueden ser causados por errores en el software, una configuración errónea o incluso por fallos en el hardware. Por lo general, existen diversas opciones para intentar solucionarlos y lograr navegar con normalidad. En este artículo abordaremos una alerta que puede aparecer: la red Wi-Fi no se considera segura. Esta alerta puede manifestarse en Windows y nos indica si debemos o no conectarnos a una determinada red.

La importancia de mantener protegidas las redes Wi-Fi en todo momento

En primer lugar, es crucial recordar la importancia de conectarnos siempre a redes inalámbricas confiables. Los hackers pueden aprovechar la conexión Wi-Fi para robar información o comprometer nuestros dispositivos de diversas formas.

Por ello, resulta fundamental contar siempre con una contraseña sólida. Dicha clave debe ser completamente aleatoria, contener tanto letras en mayúscula como en minúscula, números y símbolos especiales. Es imprescindible generar una contraseña robusta para evitar intrusiones.

No obstante, no solo debemos considerar la importancia de la contraseña en sí, sino también del tipo de encriptación que estamos utilizando. Esto resulta crucial para comprender el mensaje de alerta en el que Windows nos indica que estamos intentando acceder a una red Wi-Fi no segura.

Existen múltiples tipos de encriptación Wi-Fi y no todos ofrecen el mismo nivel de seguridad. De hecho, actualmente, algunos se consideran obsoletos e inseguros. Un ejemplo es la encriptación WEP, que puede ser explotada por aquellos con los conocimientos y herramientas adecuadas. Esto no ocurre si lo comparamos con el cifrado WPA-3, que actualmente es el más seguro.

Por qué Windows advierte que la red Wi-Fi no es segura

Windows nos muestra el mensaje de alerta de que la red Wi-Fi no es segura cuando intentamos conectarnos a una red inalámbrica disponible que está utilizando una encriptación obsoleta. No importa si la contraseña es larga y cumple todos los requisitos; en este caso, el sistema operativo no tiene en cuenta ese aspecto, sino la encriptación que se está utilizando.

En consecuencia, si nos encontramos ante una red inalámbrica que se declara insegura, ya sea en un lugar público o incluso en nuestra propia casa, la razón probablemente sea que se está utilizando una encriptación WEP o TKIP. Estos métodos se consideran obsoletos, ya que en su momento fueron las principales medidas de seguridad, pero en la actualidad no cumplen con los estándares necesarios.

¿Por qué podemos encontrarnos con encriptaciones antiguas? La razón principal puede ser que estemos intentando conectarnos a un router viejo que no cuenta con encriptaciones más modernas. También puede ocurrir en lugares públicos, como restaurantes o bibliotecas, donde no se ha actualizado la contraseña ni se ha modificado la red durante mucho tiempo. Incluso puede deberse a nuestro propio router en casa, que tal vez sea antiguo y no cuente con encriptaciones más recientes o que por algún error esté configurado con encriptación WEP, por ejemplo. Así, al intentar conectarnos en Windows, recibiremos una advertencia sobre este problema.

Para evitar que Windows nos alerte de que una red Wi-Fi no es segura, es necesario configurar un cifrado WPA2-AES o superior en nuestro router. Para hacer esto, debemos acceder a la puerta de enlace predeterminada de nuestro router. Una vez adentro, vamos al menú de seguridad Wi-Fi y seleccionamos el protocolo WPA2-AES:

Luego de aplicar los cambios, nos reconectamos a nuestra red Wi-Fi y verificamos que no aparezca nuevamente este mensaje.

Qué hacer si recibimos este mensaje

Es importante tener en cuenta que, a pesar de que aparezca este mensaje, aún podríamos conectarnos a la red. En este caso, tendríamos que aceptar los riesgos y establecer la conexión. Sin embargo, esto no es lo más recomendable y podríamos enfrentar problemas. Podemos encontrarnos con este mensaje indicando que la red Wi-Fi no es segura en dos situaciones: en una red privada, como nuestra casa o lugar de trabajo, o en una red pública, como un centro comercial, aeropuerto o estación de tren.

La forma de actuar dependerá de dónde nos encontremos. Vamos a detallar ambos casos, ya sea que estemos en una red privada o en una red pública y deseemos evitar problemas con este mensaje.

Conectados a una red privada

Imaginemos que estamos conectados a una red privada, como la de nuestra propia casa. Conectamos una computadora a la red y Windows nos indica que la red Wi-Fi no es segura. Esto lógicamente nos hace sospechar que algo podría estar mal y queremos solucionarlo.

En este caso, dado que la red es privada y tenemos acceso al router, lo que haremos es cambiar el tipo de cifrado. Para ello, debemos acceder a la configuración del dispositivo. Necesitaremos conocer la puerta de enlace predeterminada y acceder con los datos correspondientes.

En Windows, podemos conocer fácilmente cuál es la puerta de enlace predeterminada, aunque lo habitual es que sea 192.168.1.1. Para esto, vamos a Inicio, luego al Símbolo del sistema y ejecutamos el comando ipconfig. Nos mostrará información relacionada con la red y buscamos el valor de la puerta de enlace.

Una vez dentro del router, debemos ir a la sección de Wi-Fi y seguridad y modificar el tipo de cifrado que estamos utilizando. Lo recomendable es utilizar WPA-3, aunque no todos los routers y dispositivos son compatibles. En ese caso, deberemos optar por WPA-2.

Conectados a una red pública

En el caso de que estemos conectados a una red pública a la que queremos acceder, nos encontramos con algunas limitaciones. Principalmente, no tendremos acceso al router y además, es una red ajena a nosotros.

Entonces, ¿qué debemos hacer? Es crucial recordar la importancia de evitar las redes inalámbricas no seguras. No debemos iniciar sesión ni realizar pagos en un Wi-Fi en el que no confiemos plenamente.

Si realmente necesitamos navegar y no podemos evitarlo, nuestro consejo es utilizar una VPN. Mediante este tipo de servicios, podremos evitar problemas, ya que nuestra conexión estará correctamente cifrada y nuestros datos estarán protegidos.

Implementar medidas de seguridad básicas

La seguridad es un aspecto fundamental en todos los sistemas informáticos en la actualidad. Por lo tanto, es importante mantener nuestros equipos seguros, ya que las amenazas en línea aumentan constantemente. Nuestros equipos y servidores contienen una gran cantidad de información, ya sea empresarial o personal. Por lo tanto, no debemos tomar a la ligera la protección de todos estos datos. Algunas de las medidas básicas de seguridad que se deben implementar son:

  • Actualizar: Es fundamental mantener todos los sistemas actualizados. Tanto el sistema operativo como los programas que utilizamos deben estar actualizados a la última versión. Esto garantiza que se corrijan errores y se creen parches para posibles vulnerabilidades. Lo mejor que podemos hacer es configurar las actualizaciones de forma automática.
  • Antivirus: Contar con un antivirus es fundamental para detectar virus, spyware, malware y otras amenazas. Esto es crucial para mantener a salvo nuestros datos y el buen funcionamiento del sistema. Existen muchas opciones en el mercado, pero es importante elegir uno confiable.
  • Cortafuegos: Disponer de un cortafuegos nos proporciona una primera línea de defensa contra los ataques en línea. Estas herramientas bloquean las conexiones no autorizadas, permitiendo únicamente las necesarias para el buen funcionamiento del sistema.
  • Copias de seguridad: A pesar de todas las medidas de seguridad, siempre existe la posibilidad de sufrir un ataque. Por lo tanto, es importante estar preparados con copias de seguridad. Esto nos permitirá restaurar el sistema a una versión en la que no haya problemas. De esta manera, si ocurriera algún ataque, podremos volver rápidamente a poner en funcionamiento el sistema.

En resumen, si nos encontramos con el mensaje de «Red Wi-Fi no segura», significa que estamos intentando acceder a alguna red con un cifrado desactualizado. Si está a nuestro alcance, es importante modificarlo y utilizar otro cifrado más actualizado.

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